Cuentos de la Abuela Tota

El problema de los Gnomos

Érase una vez una colonia de gnomos, atentos y trabajadores que se pasaban el día haciendo zapatos.
Los zapatos de gnomos eran muy valorados, por que estaban hechos por gnomos que hacían zapatos.
Por que cuando un gnomo hace zapatos, esos zapatos estan hechos por gnomos y viceversa.
Si un zapato está hecho por gnomos significa que el gnomo hace zapatos y los zapatos gnomos son un zapato hecho por gnomos zapateros que hacen gnomos de zapatos y gnomos que zapatean por que los gnomos estan hechos de zapatos.

De todas formas, los gnomos vivían en una aldea muy bonita, llena de colores. Todos eran cordiales por que todos se conocían, y por las noches se juntaban con sus amigos del bosque y comían y bebían y cantaban y bailaban hasta el amanecer.
Esta aldea estaba dotada de una enorme cantidad de casas en forma de hongo con el techo rojo a lunares blancos, si, como los del Super Mario. Tenían ventanitas redondas por donde siempre escapaba algún que otro olor a pastel de manzana recién horneado o por donde se asomaba la doña a tirar las aromáticas heces de sus gnomillos, que luego abonaban le tierra y PLOP crecian hermosas flores.

Los gnomos nunca tenían problemas de dinero, ya que estaban en un punto medio entre la aberrante economía capitalista de producción masiva destinada a un consumidor que encaja dentro de los estándares sociales y el milenario sistema socialista que manipula las mismisimas vidas del trabajador para adaptarse a las necesidades según las ven las burocracias aristocraticas muchas veces conservadoras derechistas y antidemocráticas.

Eso quiere decir que lo único en lo que trabajaban los gnomos era en zapatos. No se sabía con certeza por qué pero de la noche a la mañana los zapatos desaparecían y los gnomos los volvían a hacer. Comian lo que cocechaban las gnomulas, que se dedicaban a la horticultura, el culto a la tierra, a la vida, a la fermentación de vinos exquisitos y a las frituras rebosantes de quesos y grasas.

Sin embargo, una noche, el más viejo y sabio de todos los Gnomos, Cara de Juan, salio a echar un pichí. Ahí mismo se hallaban altisimos hombres asi como un robot gigante de los Power Rangers, robando los zapatos que ellos habian hecho el dia anterior.
Le dijo:

-Eh vos, robotote, por que no fabricas tus propias zapatillas.
-Oh! Un asqueroso ñomo!
-Es Gnomo... y si, estamos viviendo aca desde siempre, en los hongos...
-UAJUjauJUAJUa mira que loco, che... Mis mas sinceras disculpas, señor ñomo.
-Me llamo Cara de Juan.
-Señor Juan...
-Puede decirme señor Gnomo.
-Cla, cla, señor Gnomo. Siento terriblemente este incidente. Pero debe usted comprender que estoy yo en la mas provechosa de las situaciones, ya que sin dificultad podria yo patearlo y nunca mas preocuparme por su persona. No estoy seguro de si comprende lo infestoso de la situacion.
-No me hagas reir, humano! Yo tengo poderes misticos antiguos, y antes de que levantes un pie, podria ha...

Jamas se supo lo que podria hacer ya que en ese momento recibio un puntinazo justo bajo el esternon que lo propulso a las lejanas regiones de Banania.

Informaremos.