Bodyshot
ELECTRIC 6 - Bodyshot (HD)
Podríamos pensarlo como un nuevo jingle de Yoleihu? Seh, por que no. Los tiempos cambian.
ELECTRIC 6 - Bodyshot (HD)
Podríamos pensarlo como un nuevo jingle de Yoleihu? Seh, por que no. Los tiempos cambian.
~ Nacho ha hablado, 15:00 // 4 comentarios
La Señora Sexagesimal de los Vientos se balancea amablemente sobre un huevo. Un piturrí azul le habla de las profecías de las Esfinges, los planes de los Abetos y los cada vez menos pelos en la nariz del Mardigrás.
El conocimiento es como la energía en Woodwood, no se crea sino que se transforma, y para que la Señora Sexagesimal de los Vientos aprenda esa información, otros seres deben perderla. Este fue el caso de Clemente, la libélula ausente, que de repente dejó de saber cual era el sentido de la vida. Desafortunadamente, era el único ser vivo que conocía esa respuesta. No pasó mucho tiempo hasta que Clemente se topó con el susodicho interrogante, y en ese momento una pequeña duda nació en su diminuto abdómen.
Confundido y sumido en cabilaciones profundas, clemente se llevó por delante a Sir Cal de Endario.
~ Nacho ha hablado, 20:35 // 5 comentarios
Bruno, el gavilán montañés le tenía ganas a Dick, el petirrojo. Lo persiguió por todo Camulodunu lanzando frases venezolanezcas, tales como "ió conozco tu zecreto, joán ramón!". Al final Dick se cansó de hacerse el difícil y voló derecho hacia un arbolito de Navidad, que se prendió fuego en el acto.
Clemente la libélula indigente, mientras tanto, empezaba a sentir el peso de la duda sobre su fágil exoesqueleto.
UhuhuHuHuHUHuh, pegó, re pegó, re pegó, re pegó, dijo Sir Cal de Endario. Al instante el "re pegó" se contagió a un grupo de hippies que almorzaba una ardilla en las afueras de la aldea, y estos, movidos por la urgencia fumancheril, se aspiraron todas las lechugas, todas. Jorge, el rebanador oficial de lechugas, entonces, tenía todos los motivos de la tierra para asesinar a Cal de Endario, en Camulodunu, donde los valientes se pellizcan los pezones entre sí para determinar su valentía.
~ Nacho ha hablado, 20:22 // 2 comentarios
Acá va mas o menos lo que yo entiendo de física cuántica:
~ Nacho ha hablado, 03:28 // 7 comentarios
Dos negros esgrimiendo sendas cañas de pescar en miniatura frente a un inodoro, con la esperanza de cazar un tereso para la cena.
Eso es todo, ese es el post.
~ Nacho ha hablado, 03:21 // 5 comentarios
Y mientras la zapatilla atravesaba la habitación en directa trayectoria hacia la cabeza del Presidente, pude escuchar un sonido hermoso y angelical, arpas y dindones sonaban para mis oídos solamente... era el sonido de mi vida yendose al carajo.
Instantáneamente me tomaron de los rollitos y pese a mis protestas de "Soy de huesos grandes SOY DE HUESOS GRANDES" me arrastraron hasta una trampilla del siglo XIV que había en el medio del hall. Debajo de ésta se encontraba Débora.
Oh, Débora, si pudiera hablarte, tantas cosas tendría para decirte. La primera de ellas sería "no te das cuenta que no te quiere nadie?" y la segunda "puta". Esa mujer representaba el método de tortura más sofisticado que dio la humanidad. La catarata de boludeces que hablaba lo ahogaban a uno más penosamente que si lo sumergieran en grasa para ejes hirviendo. En el lapso de 23 segundos me enteré de los pormenores de las peleas de su amiga Diábolo con su novio Bronco, de todas las características de su cartera nueva y por qué justificaba haberse gastado 300 pesos, de su enfermiza relación con el afilador de mortadelas, de sus dificultades para mantenerse al día con todos los trabajos prácticos en Diseño Gráfico y de que, aparentemente "si fuera mi amiga no hablaría con tailandeses a mis espaldas". Unos chirridos distintivos interrumpían su diatriba esporádicamente y tardé un tiempo en dilucidar que eso era su risa, lo único más espantoso que su sentido del buen gusto.
Ah, pero ¡tontos! ignoraban que yo también soy estudiante de Diseño Gráfico, y estoy más que acostumbrado a despliegues tales de mogoliquez. En cuanto me abandonaron a mi presunta muerte, introduje un clavo oxidado en la faringe de Débora, aquélla bestia que de no abundar, sería claramente una leyenda para aterrorizar a los niños.
FUEGO salió de la herida, FUEGO DEL INFIERNO, y mientras se convertía en un charco de entrañas y azufre acuchillaba el aire estancado del sótano con estas palabras: SI VAS UN MIERCOLES TE HACEN DEEEEESCUEEEEEENTOOOOOOOoooooo.....
El resto ya lo saben por los noticieros: mi zapatilla jamás golpeó al Presidente y me construyeron un monumento en Irak, al lado del que le tiró dos zapatos a Bush. ¿Quién soy yo? Algunos dicen que soy un santo. Algunos dicen que soy un villano. Pero en realidad mi nombre es James... James Revolver.
~ Nacho ha hablado, 03:21 // 6 comentarios