28.2.09

Por el fondo pasa una poronga


Mi primer intento con After Effects.

24.2.09

Pork Chop Sandwiches

Encuentros Cercanos del Tercer Tipo

Encontrarse con una inteligencia superior siempre toma un cierto tiempo para acostumbrarse sólo a vivir con el recuerdo de ese encuentro - le digo a Rubén, que intenta no perderse nada de El Curioso Caso de Bénchamin Baton.

Empecemos por el principio. Fue un fin de semana inusitadamente caluroso. La Interporn no había funcionado esos días.
Era domingo a la noche, y el problema era acuciante, porque al otro día venía gente a laburar. Fui al cyber a terminar un trabajo urgente, y cuando estaba de salida, me quedé charlando con el dueño de tan lastimoso antro. Le conté de mi problema, y él dijo aquellas palabras, "si no le encontrás la vuelta, llamalo a El Ingeniero".
Y ahí estaba, en la pc central tratando de hackear el PornBlock, El Ingeniero. Un halo de luz celestial lo coronaba. Lo saludé y agendé su número.

Aproximadamente dos horas más tarde, habiendo intentado todas las posibles combinaciones de configuraciones que se me ocurrían, la Interporn seguía como judío en un entierro. Así que llamé a El Ingeniero. Y vino.

Fue con tono jocoso que me preguntó "el modem siempre está así boca abajo?" y fue con tono curioso que yo le respondí "em sí".
El Ingeniero se arrodilló, apretó un botón oculto, y cuando se incorporó ya había, mágicamente, Interporn. Ese botón oculto no lo sería así si el modem viviera boca arriba, pero aún así El Ingeniero, pienso, no debe haber dejado de pensar "¿a los retrasados mentales se les cobra menos?".

De gaucho nomás, El Ingeniero peló un Live CD de Mandriva y lo corrió en la PC de mi padre, para investigar la causa de su lentitud. Cosa que logró.

El Ingeniero y yo hablamos un rato de cosas locas, como Open Source, bases de datos, la vida, el amor, los astros y los sueños. Llegado cierto punto de la conversación, El Ingeniero menciona, como quien no quiere la cosa, que trabaja para Google.

En ese momento, señores, les diré que se me detuvo el cooler. Un técnico de Google en mi propia casa, esto era perturbador. Me invadió una oleada de cataplaxis que me dejó tan idiota como una publicidad de Colgate.

Pronto después de eso nuestra entrevista se dió por finiquitada por un desembolso de $80, que yo considero bien pagados.

Ésta es la historia de El Ingeniero un personaje de adoración, cumbre de mis deseos y génesis de mis emanaciones. El Ingeniero es más que un hombre, es un concepto, un ideal, un espíritu de valentía en el pecho de los argentinos que nos impulsa a seguir adelante cuando toda la esperanza se apaga.
Sólo podemos hacer camisetas con una estampa de su cara y rezar por que algún día, desde lo alto, nos sonría y nos apriete a todos el boton de reset que tenemos oculto allá donde no nos da el sol.

Y, como yo sabía que ocurriría, Rubén ya completamente desentendido de la película, se puso de rodillas y me besó las manos con que había tocado a El Ingeniero.



El Ingeniero.

21.2.09

Cuando las cosas salen mal

Mirá - le comento a Rubén, muy canchero, cruzando las piernas como si estuviéramos tomando un café en el más porteño de los bares - la cuestión fue más o menos así. No fue mi intención golpear a ese rottweiler. Tampoco lo fue usar el lanzallamas en ese pabellón de preescolar. Son cosas que le pasan a cualquiera cuando enciende su PC y el sistema se empieza a caer.

Reviví el día desde el principio, desde que el Google Chrome me escupió, me insultó, deshonró mi linaje, al otorgarme un error y luego decir "Aww, Snap!".
Dije "fuck it" y proseguí a instalar el Morcilla FuegoZorro tres.
Luego la Internéc desapareció en el medio de una muy importante conversación con Hermana de SDU-7. Al reiniciar mi Computadora, el sonido de bienvenida de Windows se demoró por uno o dos minutos, lo cual no es muy buena bienvenida que digamos.
Aproximadamente dos quinceavos de cuarto de hora más tarde, me es presentado un diálogo con un countdown seteado en 1 minuto que dice "guarde todos sus documentos, Windows se apagará".

Fue entonces que puse un anuncio en la cartelera pidiendo a todos los IT Technicians del Reino que acudieran a solucionar mi problema. Aquel que pudiera, recibiria la mano de mi hija, mas ninguna otra parte de su cuerpo.

Nadie pudo. Gran alivio para mi hija, pero gran contratiempo para Mí.

Les escribo desde un Live CD de Ubuntu 7.10. Estas son las palabras de un hombre sin fe. Mientras tipeo, en otra computadora tengo bajando Mandriva One, con la débil esperanza de que tal vez, solo tal vez, corra la Adobe Creative Suite 4 bajo Wine (cosa que según El Ingeniero, no debería ser ningún problema. Para más información sobre El Ingeniero, lean el post que todavía no escribí).

Algun día, mi amor.

- "Algún día, mi amor." - concluyo mi relato. Rubén me mira como se mira al negro que te limpia el parabrisas aunque le decís que no.
- No sé quién sos ni por qué me contas esto acá. ¿Me dejás ver la película?
Y de esa forma Rubén, o para mí que se llamaba Rubén, me dejó a mis cavilaciones en mi butaca y volteó para seguir viendo Madagascar 2. Qué mundo pequeño.

15.2.09

Un sable en el Aire

Por otra de esas curiosas coincidencias que sólo suceden en las leyendas, en el mismo instante que Pergo descifra su propósito, y el propósito de su viaje, el Mardigrás de Carlbabia libera de su agarre a la gaviota que lo llevó hasta ahí, y el plumífero en cuestión asciende hasta la estratósfera como consecuencia.
¡Ñelfo! profiere el crudo hombre. ¡Aléjese del calefón místico, returne a la Corte, tal vez le permome la vida!
No es tal cosa, dialoga Pergo. Acérquese, vea bien aquéllo.
Es esto un járbol felgurente, ¿qué de con él? acota el desnudo Mardigrás.
Es un járbol, dudas hay no. Pero es más grande el asunto. Espuche atentamente.
Así lo hace el Mardigrás. Escucha, y árbol susurra.
Pergo confirmale: este járbol felgurente es Lo Todo. La noche y los días, la tierra y las aguas, la jistoria y las batallas.
¿Qué Iperbora es esta? acusa el Mardigrás, con repentino pánico. ¿A qué tiempo nos has viajado, Ñelfo, tú?
Vea, Pergo tranquiliza, vea el cielio. Las éstas estrellas nunca cursaron el cielio de Carlbabia. Aventuro que nos he viajado al principio de los tiempos, o bien al final de los tiempos. Si retrocediamos o avancitamos, éso no lo constato. Pero vea ahora, vea el járbol.
El Mardigrás obedeciele, pues es su Ñelfo no por nada.
¿Son ramas aquello sobre nosgotros?¿O son acaso raíces? Aventuro, pues, que encontrámosnon en la otra parte de Carlbabia, aquélla que no es visisible. Atienda ahora, si es tan abable, mire al piso.
¡Válgame! exclama el Mardigrás. ¡Éste járbol pende de un jilo!¡Podramos tenerlo para nosgotros! Camibiar la jistoria, traer brosperidad y richesas a Carlbabia, crecer y ponquistar Iperbora.
Jái, podramos, asintió Pergo. El járbol felgurente está aquí con ese porpósito. Es mismísimo por eso que no podemos tobarlo. La jistoria y la tierra tienen un curso naturial. Y es ése aquél mi porpósito y el porpósito de mi viaje: llegarme aquí para no tobar este járbol.

El Mardigrás lo piensa sumamente; entonces, surte a Pergo un catús de proporciones épicas, y lo inhabilita para moverse. A continuación acércase al pié del árbol, aquél que es fágil como sólo puede ser frágil el balance del mundo, el tiempo y los elementos. Sin embargo, un chillido torbo lo hace volver en redondo y del fondo del hongomóvil se desprende Cletus el Segundo Hombre en Armas, ya con sus ropajes ya secos.
El Mardigrás estira su maño para desenfundar el sable reglamentario, pero sólo encuentra una nalga, la suya propia. Cletus, sin embargo, todavía guarda el suyo en su funda, cariñosamente apodada traga.
Mientras la cabeza cercenada del Mardigrás traza un arco en el aire, Cletus, quien tiene todavía órdenes específicas de hacerse mierda, lanza el sable hacia arriba. Gira hacia Pergo y le dice: o nsinu nvuoros iny tystäv äkukat.

Momentos más tarde, el sable se hunde en su cabocha. Eventualmente su cadáver se convierte en compost, que no es mierda pero casi casi, y en el mismo lugar donde muere, florece una hermosa y solitaria zez.
Pergo, ya arriba y caminando, da un medio de vuelta y se aleja, y cuando el Sol 1 quiebra el horizonte, muta en una luzviérnaga. De vez en cuando otro Iperbóreo lo ve pasar, y se siente en un mar de estrellas.

14.2.09

Capital de Antibabia

El Océano Dártago está a varias kiloaxilas de la cara oeste de Tuctú, la que mira a Carlbabia. Va en contra de todas las probabilidades que al ser succionados por el tifón, Cletus y su desnudo amo sean dejados en un pequeño bosquecillo en los lindes de la montaña. Así todo, es precisamente en un pequeño bosquecillo en los lindes de la montaña donde el tifón los libera. Va también en contra de todas las probabilidades que se topen con un pantano de colores chillones en donde el Ñelfo a quien estaban buscando se sumergiría dentro de algunas horas. Todavía es de día.
El Mardigrás, fresco como una hoja de lechubia, camina ágilmente por entre los patrones de belleza algebraica que forman las raíces de los árboles. El Segundo Hombre en Armas Cletus, quien no había sido tan cauto de sacarse la ropa, lo sigue a duras penas, pues las ocho capas de terciopelo que son costumbre en el guardarropas cotidiano del hombre civilizado ahora están empapadas.
Mátese, lo instruye el Mardigrás mientras se detiene en seco. Si no puede seguir mi paso de gacela ya no hace a la causa. Ha servido valientemente. Ahora mátese. Hágase mierda.

Es de noche, y retomamos la historia de Pergo. El hongomóvil se mueve ahora a velocidades vertiginosas, en línea recta a la luz blanca proveniente del sitio donde Carlbabia debería de estar. Rayos dorados pasan a sus lados, y aunque en realidad son inocentes luzviérnagas que nada saben de changuitos, ciudades ni carlbabias, Pergo se siente navegando un mar de estrellas, pues todo es borroso, es como un candombe de emoción.
Emoción por el morrón.
La luz en la distancia, es ahora una luz no tan en la distancia, y toma la forma de un árbol alto como un taño y grosso como un modo. Un árbol que emana un brillo frío y cortante, que acapara toda la atención del firmamento. No tiene hojas, sólo ramificaciones nudosas y caóticas. Y le habla a Pergo, le habla en círculos.

...parast amit ävo itehdä. Jotk akaikk inäette, o nsinu avarten. Tehd äoma nolemassaolo ntäällä, parast amit ävo itehdä. Jotk akaikk inäette...

Y Pergo puede sólo mirar el árbol, porque el árbol es todo. Es Iperbora, y el tiempo en Iperbora. Es los dos soles, es lo que hubo y lo que habrá. Es cada gota de energía en las plantas fosforescentes, cada número de la revista Ovejero Alemán. Cada nube y cada pétalo poronguiforme.

13.2.09

Hongomóvil

Sinull eo ntarkoitukseen. Voi tvälkynt äe iol evaihtoehto, susurran los árboles y el viento a Pergo. Pergo se sube a su taburete y se lanza de un clavado al pantano lodoso. Sólo que en lugar de el lodo blancuzco del que hubiera esperado verse cubierto no lo toca, pues Pergo pasa a través de la superficie y aterriza sobre un colchón esponjoso y húmedo con aroma a Frutos del Bosque, en una caverna algunos metros por debajo del pantano.
Dicho colchón resulta ser la cabeza de un frondoso hongo, y dicho hongo ahora se mueve a lo largo de la cueva, como si hubiera esperado la llegada de Pergo durante miles de años luz. En la parte inferior del hongo, sin embargo, algo se está cocinando.

Un tifón en la distancia se llevó a una cabra. Eso es todo en lo que puede pensar Cletus, quien, montado sobre un dandelio junto con el Mardigrás y flotando a la deriva visualiza un tifón en el medio del Océano Dártago.
Temiendo por su vida, se apresura a coser tapioca a toda volecidad, mientras el Mardigrás con una calma inusual se despoja de sus pojas y se despija de sus vergüenzas¹.

Pasado un largo rato mientras Pergo viaja a lomo de hongo, el aire comienza a hacerse menos húmedo y pesado, y en el techo del túnel subterráneo aparecen ahora raíces, cada vez más largas a medida que avanzan. Finalmente y sin previo aviso, irrumpen en la noche abierta, y Pergo se maravilla, pues una estela de nebulosas, estrellas, cúmulos, halos, auroras, cuásares y lluvias de meteoros recubren la bóveda celeste, y él es incapaz de reconocer a la mayoría. Busca la Estrella del Poniente y la localiza a unos 120 dragos de separación gangular de donde la viera la noche pasada.
El hongo sigue desplazándose suavemente colina abajo, y Pergo reconoce el valle como el suyo propio, solo que donde debería estar Carlbabia no la hay; en su lugar hay una luz blanca tan penetrante que duele mirar.

¹ N. del N.: expresión coloquial muy en boga en Carlbabia. Hay una anécdota muy poco interesante detrás de esto, tanto es así que el último que intentó recordarla quedó en un coma de aburrimiento. Basta aclarar que usé esta expresión para ilustrar la situación de desnudarse de forma pintoresca y acorde a las añoranzas costumbristas del Mardigrás.

12.2.09

El desfase en Iperbora

Pergo, quien varios días atrás escapa de Carlbabia y su Ñelfazgo al servicio de la Corte, ahora ve una luz al final de la escalera. En algún punto difícil de identificar, sin embargo, Pergo empieza a subir en lugar de bajar, como si las leyes del arriba y el abajo hubieran quedado atrás. O tal vez de tanto bajar, ahora subo, piensa Pergo.
La luz se acerca. Cuando se está a apenas unas pocas axilas de distancia, se adivina que la luz es la salida a una selva, y los primeros aromas a pasto húmedo, a suelo y corteza invaden a Pergo.
Los maranjos están en flor, y esto extraña a Pergo, porque esto sucede con cada doble equinoccio, y según sus cálculos todavía faltan 567 noches para el próximo.
En todas las direcciones hay árboles antiguos y robustos, cuyas ramas y cuyas raíces se entrelazan entre ellas, dibujando nudos y patrones. Además, como nota Pergo con tranquilidad, los árboles toman forma de figuras humanas, algunos en posiciones indecorosas, otros mostrando su anatomía con descaro. Uno se está fumando un pucho. Pergo camina un largo rato por una senda de tierra joven, sobre la cual los árboles no parecen estar interesados en crecer.

El Segundo Hombre en Armas del Mardigrás, Cletus, está sentado sobre una piedra en forma de muñón, y todo a su alrededor una vegetación como nunca había vístose en Carlbabia exhubera jubilosa. Más allá el Mardigrás discute entre susurros con un torfo. Están en el Cráter de Tuctú.

Un tiempo después, llega Pergo a un pantano de aparente incruzabilidad. El lodo lechoso está vetado por los colores más insólitos: franjas de magenta, índigo, vezga, cadmio, lima, ñiervo y cadeda surcan los bucles de la superficie.
Duda por primera vez, pues un pánfilo en segundas nupcias una vez maldijo a toda su familia a morir a manos del color cadeda; su mamparabuelo Mánganus pereció bajo una losa color cadeda que cayó del cielo, su tizabuela fue atacada brutalmente por la Linchada de Charrúa Voleybol, un equipo deportivo cuya bandera era color cadeda; sin ir más lejos, su enfermana Mongo feneció envenenada por unas heces de gú color cadeda que encontró en el bosque y que ingestó sin darle muchas vueltas al asunto (no por nada se llamaba Mongo). Por todo esto y más, Pergo duda cuál es su próximo paso, por lo que se sienta en un taburete. Y escucha.

11.2.09

Un pasaje en Morgan

Vernomeia, Loinolvia, Verlagia, Tibán, Loinn, Corsá, Vaarlann, Warponen, Lectponia, Sagnovia, Gelcoria, Tierpater, Tidpoia, Derpenia, Aerroter, Whiscola, Coglal, Sagpoter, Cogx, Raelpegen, Tierrolon, Aersax, Toyota, Aerbaria, Obobo, Vaarcolon, Gelcagil, Lencoia, Hhaus, Lenlovia, Waarporia, Colgter, Yllagil, Aercem, Sagmepes, Tidmogeia, Gelpest, Funga, Aermelon, Relniovia, Tiercegen, Carmen, Sandiega, Relsok, Cogtevia, Versaghil, Sancegen, Relbagen, Melcagen, Gelronia, Mecagué, Tiertek, Derliovia, Mingitoria, Dernopes, Forsom, Verbatim, Terniox, Tidmoter, Rellalon, Loilepes, Miriam, Cogpapes, Sanliovia, Dermol, Vaarlionn, Tierbam, Aerronia, Saglogil, Melnioter, Aerlapes, Lencom, Tidsalon, Foria, Aerpogeia, Verria, Tidlapes, Melsann, Vaarnioter, Tidmoia, Loilionn, Vermoter, Relbalon, Aermem, Cogcegeia, Coddy, Túbita, Gellolon, Casiopeia, Violinino, Vaarmonia, Gelvia, Loilann, Vercalon, Lencak, Vernogil, Vertel, Forcopes, Cogcel, Relbal, Termol, Cogsal, Gellom, Buffy, Chastid, Loigeia, Keolor, Forpolon, Loinonn, Lencoria, Sancagil, Vaarsox, Gelpagil, Mellom, Terliopes, Relcopes, Vaarpovia, Tercann, Jonmaricohn, Lenbageia, Versak, Vaarlagen, Loiliovia, Sagnox, Vaarsol, Tiersoria, Teletek, Derlox, Terloter, Coglel, Lencogen, Sagpex, Odie, Fornn, Tierleter, Terpolon, Relcoria, Vaarnogeia, Relcal, Aerceter, Vercopes, Ursa, Macarronia, Forpaia, Relcegil, Tiernolon, Lenloia, Tubaba, Finonia, Relceria, Aerpageia, Melcak, Gelbater, Gelsann, Gelliox, Ternol, Gelbapes, Loiroria, Tidk, Relparia, Sagcam, Melmol, Mellon, Sagcovia, Forcogil, Relpek, Rellegen, Forsapes, Gelbax, Agenda, Derlonn, Loitegeia, Procenex, Vaarcaia, Gelmex, Derpater, Esponja, Vaarpolon, Señora, Cogcenia, Sagmok, Aersogen, Fimovia, Ficoria, Dersal, Relpex, Relleia, Versok, Derpol, Verpogeia, Coglioria, Relmevia, Camerunia, Sagroria, Terlex, Dermeia, Versonn, Termelon, Gelgen, Tierliogil, Meola, Loicelon, Formom, Terbapes, Vercolon, Relpogen, Chupamia, Melcek, Lenpelon, Melloria, Tertegen, Gelcoter, Derteter, Fortek, Tidpavia, Vermopes, Aercel, Foremann, Gelloter, Sagtek, Saglelon, Cogloria, Nidorina, Loilenn, Verpeia, Gelcater, Sanmem, Verpogil, Uzurpa, Relmex, Tiermonia, Gellagen, Tierpepes, Sancavia, Vaarlonia, Terpalon, Relpax, Terlevia, Tidlepes, Tiertex, Sanmeria, Gellania, Sagpenn, Verpegeia, Cognia, Rellogil, Telecom, Porroncito, Santegen, Derl, Sanpaia, Tierliopes, Aerpox, Gelnolon, Forpogeia, Sagtevia, Saglania, Aerpeia, Rejuvensex, Sagpopes, Dercogil, Sagcom, Afip, Lensania, Tierlex, Aertel, Quecolon, Finogeia, Vaarpam, Dermenn, Vaarlionia, Tercoria, Cogsak, Dergeia, Ficoter, Loipapes, Derbalon, Tierpenia, Zompog, Forponia, Tierlonia, Lenmogil, Nermal, Dersoter, Cogniok, Vermenn, Lebanion, Baticueva, Porongia, Aerlom, Filon, Firom, Relnonia, Sanperia, Aermogeia, Forlem, Aermepes, Sannn, Loilopes, Tiercenia, Terlom, Tidlogen, Sansogen, Sanbak, Loilon, Tiernioia, Sansonia, Terlionia, Lipsum, Tierpogeia, Sanrok, Vaartenn, Saggen, Saglax, Dermem, Cogmex, Tiercelon, Fivia, Gelcegeia, Tercopes, Fimeter, Ternogil, Cogliox, Lenleria, Tidlek, Tercenn, Sanpalon, Garfield, Subibaja, Paidofilia, Cognom, Tierria, Lechuga, Aerlegen, Pechuga, Terpater, Tidcageia, Saglegen, Relsogeia, Ficok, Relmel, Gelcom, Vaarcenn, Tiercogil, Vercek, Jotase, Tidsak, Lorelei, Meltex, Loisonia, Morgan, Vaarbania, Rellom, Vaarcann, Zuca, Melcoia, Termonn, Vaarmelon, Forcex, Gelpopes, Rellionia, Relcem, Coglogeia, Loiniogen, Vaarlex, Saglogeia, Tiercegil, Sagpem, Rellox, Dersagen, Gelcania, Gelniovia, Gellam, Loiceter, Mellok, Vaca, Tergil, Gelpem, Loiteter, Loipepes, Verpem, Tercovia, Tercam, Cognonia, Gelcol, Vilsom, Marronemia, Cogmonia, Pikapika, Sannionn, Sanniogen, Tierbavia, Tidsoter, Dersoia, Fisonn, Verconn, Dermopes, Gelceia, Tierlageia, Forconn, Sanmoia, Aertek, Loiporia, Cogmovia, Loinoter, Relmol, Formalia, Tidliox, Gelsagil, Melpeter y Tidniotr son los nombres de las 411 casi islas a que Pergo da nombres durante la noche. Satisfecha, la cisterna anuncia su verdadero nombre: Maa Nosa, que es lengua bella para País de Sub. Pergo mira hacia abajo; en la boca de Morgan, una entrada de piedra coronada por los versos eivä ttiedä, j atietämättä, maa o nsinun. En esta entrada, halla Pergo una escalera que baja.

El Mardigrás, seguro en su arnés y jugando al Patapon en la PSP, cuelga de Cletus, su Segundo Hombre en Armas, quien escala impérrito los salientes de la cara oeste de Tuctú, con la honradez que conlleva su nombre familiar, pues su tatara tío McCletus Deltorbo había sido en su día quien dirigió al ejército Carlbabio contra los Nortrenses, y perdió.

10.2.09

País de Sub

Siguiendo las instrucciones escritas en una galleta de jengibre, Pergo se zambulle al estanque con los corales de ejemplares de Ovejero Alemán. Unas curiosas flores de tallo violáceo, con pétalos rojos y pistilos con pequeños ojitos en las terminaciones siguen sus movimientos atentamente, pues Pergo es la primer especie foránea en visitar el estanque en unos cuantos millones de años.
Ahí, en el fondo del arrecife literario hay una entrada grutal, a donde Pergo penetra sin más, como siempre, sin ningun motivo en absoluto. Metros más abajo, la gruta se transforma en abismo, pues algunos bucles del túnel logran cerrar camino a cualquier rayo de luz de la superficie.
Pergo, guiándose por el mero tacto, termina encontrando aire en una cisterna que no tiene eco.

Cletus, por su parte, sufre el proceso inverso. Mientras el aire abunda en el desierto de Secovia, el agua es un bien sólo reservado para el Mardigrás de Carlbabia, quien porta una botellita de Paso de los Toros consigo. Momentos antes de que el Segundo Hombre en Armas se desplome por cáncer de piel, una lluvia cae, arrastrada por el viento desde Tuctú y pone en sus oídos palabras en un idioma desconocido de inflexiones gráciles y diptongos huecos.
Dieciocho axilas (la axila es la medida estándar en Carlbabia) más adelante, los soles terminan abruptamente, relegándose ambos tras la figura de la montaña.

Achís, dice Pergo, y estornuda debido a la oscuridad. Inmediatamente la cisterna queda iluminada por unas raíces corpulentas y nudosas recubren la cámara de piedra desde el piso hasta el techo, como enredaderas subterráneas, destellando con un hipnótico fulgor oscilante turquesa.
El habitáculo en sí es amplio como un país pequeño, y está poblado de diminutas ínsulas que aquí y allá sobresalen de la superficie del agua. Algunas son pebetonas, mientras que otras son altas, y describen un suave arco hasta el techo. Algunas, incluso, tienen más de aquella extraña vegetación radiante. Ondas escapan alejándose de los islotes, y juguetean en los intersticios.
Pergo halla su camino hacia un montículo de notorio parecido a Morgan Freeman, y se prepara una pequeña merienda. Con un café con leche humeante en su mano, comienza la difícil tarea de poner nombres a cada una de las 411 islas.

9.2.09

Cráter y Secovia

La Estrella del Poniente corona la indecorosa constelación del minusválido sanguinario, Sagnavalminú, mientras Pergo examina en detalle el recoveco naturalista donde se despidió de una gaviota en pelotas. Y, descubre Pergo apartando malezas, he ahí una grieta en la roca, una apertura cuya amplitud permitiría amablemente pasar a un hombre voluminoso llamado Kläut. Intercede, pues, Pergo en el pasaje, que, a pesar de la oscuridad, permite intuir al tacto que está tapizado de carnosa hojarasca húmeda y suave musgo que suspira al roce.

Subido al Changuito Real, el Mardigrás de Carlbabia es empujado a través de la llanura llamada Secovia por su Segundo Hombre en Armas, Cletus.
El sol irradia, las gotas sudoríferas ruedan por el semblante iracundo del Mardigrás. Alarga su puño derecho por sobre el costado del changuito y manotea una zez que, contra todas las probabilidades, crecía sola en el medio de la tierra seca. Sin dedicar muchos miramientos al asunto, se la lleva a la boca y la pasta. Muge. Que bueno es estar vivo.

Sale, finalmente, Pergo, al otro lado de la grieta, y encuentra un cráter paradisíaco, en una hondonada profunda, que socava la tez de la cordillera escarpada. Toda clase de vidas lo saludan, las hojas de palmeras se mecen con una brisa que, a su vez, arrastra gotas de agua de la vertiente que hay más allá. Pupanes, salpoyas y tenarios se pesiguen aleteando de un árbol a otro. Torfos se hamacan en unas hamacas hechas con ruedas de camion. Pirretes y shelmúes nadan entre montículos submarinos de viejas suscripciones a la revista Ovejero Alemán.
Un torfo, sin embargo, no la está pasando bomba.

Una nube solitaria y pomposa se asoma al cráter comiendo pochoclo y comenta, es muy mala película, Sean Penn es el único que labura bien. Luego se deshace, y el viento arrastra la lluvia hasta Secovia.

8.2.09

El Vuelo de Pergo

En Carlbabia, la tierra del mate amargo, la gente maneja changuitos de supermercado por las calles de tierra. El pueblo es pobre, casi no queda plata para comprar gomitas. Nadie sabe de qué están hechas, pero son dulces y son consumidas como el caviar.

Pergo el Ñelfo de la Corte suspira sentado sobre el alféizar de alabastro de su residencia algo ostentosa a ladrillo descubierto. La gente humilde navega aquél mar de tierra arenosa que es el pueblo, empujando rutinariamente sus changuitos.
Pergo, en un impulso impropio en un Ñelfo de la Corte estira su mano y coge por las patas a una gaviota en pelotas. La gaviota piensa, a su vez, esto va de mal en peor.

Pergo, 4 meses de 18 días, 2 meses de 34 y 1 mes de 7 días después, libera a la gaviota de su agarre, y por la inesperada diferencia de peso, la gaviota desprevenida da un super aletazo y se propulsa a la estratósfera.
Pergo el Ex Ñelfo de la Corte observa dónde está. En un recoveco sobre la pendiente rocosa de la antigua montaña de Tuctú un curioso brote de pasto, abetos y nidos de orugsias irrumpe la sequedad como un oasis de vida. El sol 2 se está poniendo allá donde la vista no distingue los venados tuertos corriendo por el campo, condenados por toda la vida a no saber qué hay a la izquierda, porque están tuertos. Los escasos rayos mortecinos apenas arañan Carlbabia, que quedó atrás hace mucho.

Al mismo tiempo, el Mardigrás de Carlbabia lanza un ganso por sobre todos los Callababeros de la Corte, con exhumante furia. Cómo, señores, esperan que gobierne a mi pueblo sin la asistencia del Ñelfo de la Corte, esto grita el Mardigrás. Inauvicto. Glesastroso. Bagsurdo. Traigan al Ñelfo.

Pergo duerme durante cuatro milésimas de segundo (coma tres, tres, tres, tres, tres...) en tiempo de árbol. Luego despierta, y es de de noche: ambos soles están agobiando a un poblado desconocido, en un continente desconocido, en algún punto meridionalmente opuesto de aquel extraño mundo llamado Iperbora.

1.2.09

Cuestiones Religiosas

Buen día gente patética.
Ramireo al habla.
Ya que se quejaron de mi anterior post, acá les traigo ciertos comentarios de cierto foro cristiano.
Explico: ayer, a eso de las 5:30 de la mañana estaba chatiando con la única rubia que se queda hasta esa hora (?) y como me aburría, comencé a transitar por los pasillos de un foro tan cristiano que podría haceros ordeñar una vaca al dulce compás de un ave maría.

En fin, aclaro que TODO lo expuesto es tal cual estaba ahí, copié y pegué simplemente. 
Ahora sí, a los hechos.

Queso- Queso señores, ¡Quesooooo!
Wenas DIos les bendiga, soy Jahaira, soy nueva en el foro y me gusta conocer gente,
 buscar en otras culturas, me gusta conocer otras culturas. soy convertida desde hace 3 años.
 hehe bueno sobre mí, mi sabor favorito es el queso, me gusta cantar, leer, y aprender cada día más.
 Bueno, estoy en constante defensa de la verdad y bueno tambien en el estudio de la palabra en general,
 tengo un blog de falsas doctrinas el cual es www.nofalsasdoctrinas.blogspot.com

Paranoia- Lo que hace la droga...
Cuando Dios me llamó yo escuchaba que me llamaban por mi nombre,
en cualquier lugar, en la calle, y yo miraba y no veía a nadie.
Bendiciones

Amo a cristian- Simplemente patético...
Hola Débora,
mi nombre es Alfredo, tengo 30 años y soy de España, si quieres mi amistad mi correo es alfredoamaacristo@gmail.com
El Señor te bendiga!
Chao

Intento- Qué gente triste, por favorrrr...
ahora hago musica cristiana, bueno eso intento
aqui tengo la musica nada mas 
www.myspace.com/xjesuslivesx

Saludo- Todavía no lo comprendí del todo...
Te saludo en Cristo

El príncipe, el anticristo- Cuando a la gente ya no le llega el agua al termotanque, dice boludeces...
Quiero compartir una revelaciòn que recibì de Dios como seis meses atras del anticristo,
y ese personaje es el Principe Charles de Inglaterra, tenemos que estar preparados, Cristo esta a las puertas.
www.youtube.com
Exposing the antichrist and the false prophet.
tenemos mucha informacion de este personaje adelante lo pondrè.
Bendiciones

Demoníaco- ¡Ciencia ficción pura y dura señores!
Al no ver que su marido no volvió y pese a que se le dijo que iniciaríamos las oraciones por éste milagro, 
la hermana se desanimó y fué con la medium para que ésto se cumpliera y, la volvió a visitar. 
(NO esperó al cumplimiento de la promesa del Señor Jesús)
En ésa entrevista con la medium y con otros satanistas, 
a la medium se le metió un demonio el cual hizo que la voz y el rostro de la medium cambiaran materialmente y dijo
"que no podía ayudarla por la razón de que ella y su hijo tenían VIGILANTES que no podía reconocer pero que 
a su vez cubría a la hermana y a su hijo"...

Paja- ¡Ay por favor, lo único que hace es orar y enciam lo hace mal!
Un dia por la mañana me levante a orar, y al rato me quede dormido cuando de pronto escuche una voz del cielo, 
era el Señor Jesus, empezo a hablarme de nuestra lider de nuestro ayuno, yo le dije; no quiero hablar de ella Señor, por el mismo hecho de no juzgarla.

Michael Jackson- AJAujaUJAujaUJA, este Michael, ahora recurre a la fé como excusa para conseguir presas
Llevo añoz queriendo adoptar un bebé, eztoy enamorado de los niñoz, de zu zonriza, de zu forma de ver el mundo, de zu amor.
Pero no me dejan adoptar.
Hize cozas malaz en el pazado, laz azepto, y ahora no confían en mi como pozible padre. Eztoy deztrozado y amargado.
Zólo la fé y vueztro apoyo puede zacarme adelante, yo zólo quiero compartir mi amor con un pequeñín al que darle todo y que zienta bien dentro a jezús.
«Dejad que los niños se acerquen a Mí»
Un zaludo y que dioz os bendiga.

Suicida- Este se iba a matar, no me jodan xD
yo lei la biblia solo por leerla , a pesar que no lo hice a conciencia he podido grabarme algunos versiculos de ahi
Quisiera saber si ahi hay algun versiculo que condene el suicidio,les agradecere que si me responden me escriban a 
efeeme_21@hotmail.com. gracias y que DIOS los bendiga

Pack Tecnológico- ALTO pack tecnológico ehh :P
Desde la web www.jovenes-cristianos.com se está llevando a cabo un sorteo, de lo que ellos llaman "Pack Tecnológico".
esta compuesto de un mp4 de 8Gb lleno de musica cristiana y predicaciones, un Pen drive de 8 Gb de diseño, y algun regalo sorpresa.

El cielo y el infierno- La concepción del cielo y el infierno más pelotuda- The Beatles... IN HELL!!!
entonces el creo a hittler ... hizo que mataran mucyhsisisisiismos judios
y ustedes tal vez em repsonderan con lo del libre albedrio algo asi ...
pero miren !!! hittler mato infidad de gente .. que dios no pudo parar eso ?
y olvidar e llibre albedrio .. tenia ke sufrir tanta gente ? ..
el cielo : papas , monjas , y bien y nubes
el infierno : jimy hendrix los beatles video juegos y sexo

Punk cristiano (?)- ¿Estos conceptos no se contraponen de cierta forma o yo estoy errado? xD
Hola soy nuevo en el foro, estoy buscando personas interesadas en formar un grupo de punk cristiano en bogotá-colombia, es un proyecto serio, 
por lo tanto se requiere de mucho compromiso, sino conocen nada de punk cristiano estas son algunas bandas son slick shoes, hangnail,
 me pueden escribir a. ultimoinfinito@hotmail.com

Cesto de amor- Bue, con este simplemente me quedé sin palabras jaja xD ¿una percha? o_O
Cada Cesto de Amor contiene: 
Pasta de Dientes (1)
Cepillo de Dientes (1)
Jabón de baño (1)
Desodorante tipo Gel (1)
Toalla (1)
Percha (1)
Folleto Evangelístico (1)

Bue, eso fue todo por hoy.
Y de postre les dejo este thread que habla de cómo Dragon Ball está producido por el mismísimo lucifer.
http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php?t=10565
No pongo citas porque es larguísimo.
El que quiere verlo, allá él xD

Saludos y hasta la próxima redada,