Long play: currículum plus ultra

Soy Neil Buchanan nuevamente, disculpen la demora, hice remodelar la casa para ensanchar todas las puertas. Vamos con más consejos sobre cómo perder esos kilitos que hacen confundir a los balleneros chinos que te siguen a todos lados tirandote arpones.

6. Conseguí una de esas mangueras para bomberos y encontrá una forma de meterla en tu cartera, de forma que vayas a donde vayas tengas listo tu dispositivo de lavaje intestinal, entonces suponete que pinta ir a MacDoñalds, todo bien, te clavás un Big Whoopie Goldberg, despues decis "disculpenmén chicas, tengo un tereso del tamaño de EuroDisney atravesado en el colon, creo que le voy a tener que pedir ayuda a los encargados sólo para sacarlo del inodoro y transladarlo a un container que ya pedí antes de salir de mi casa porque ya saben que todos los jueves tengo tránsito lento, y como me gusta un chico re lindo que se llama Tomás y me contó que su exnovia se afeitaba el orto y despues le empezaron a crecer los pelos más duros y al final se tenian que mantener lejos de los velcros porque si no la mina se quedaba pegada y no la sacaban más salvo con fuego, y como ustedes saben a mi no me gusta el fuego, me arruina el maquillaje, asi que me voy al baño, ya vengo." pero en lugar de defecar un sorete del tamaño de EuroDisney, usás la manguera y te hacés el enema del siglo, por lo menos hasta que te llegue al esófago, de esa forma las grasas no se absorben y en cuestión de semanas vas a a ser Monica Belucci (?). Lo mejor: técnicamente no es bulimia porque no vomitás, al menos no por arriba.
7. Rubro 59. Sabés como vas a ejercitar? Y encima ganás plata.
8. Alimentate por vía intravenosa. Si tu instinto gordil te indica que debés licuar un pancho y ponerlo en lugar del suero, pedile a alguien que envenene una salchicha al azar. Si decidís tomar el riesgo y justo te comés el pancho venenoso, te morís por gorda hija de puta, y se acabó la historia.
9. Sólo permitite comer partes de tu propio cuerpo. Durante un tiempo vas a sobrevivir a base de uñas, pielcita caída y pelo púbico. Luego tu instinto gordil te puede llevar a masticarte una teta o freir una nalga... de una forma u otra, perdés peso.
10. Pedí para los 15 ir al Tíbet, y pasá años ahi aprendiendo sobre la vida despues de la muerte, y las diversas formas de reencarnacion. Despues decile "pelado" al Tibet Jefe Final y el te va a arrancar el pelo con los glúteos esculpidos de Monje Tibetano. Te agarra un panic attack, te morís ahi nomás, y reencarnas en una mina flaca como Sarah Jessica Parker, que parece un caballo.

Fin. No se pierdan el maravilloso descenlace de esta crónica anémica.