29.3.08

Turismo aventura en Irak

  • El primer día en Namibia aprendí a abrir una cerveza con el borde de la mesa.
  • El segundo día aprendí que lo que importa es lo de adentro.
  • El tercero, que madre hay una sola, o mejor dicho había hasta la concepción in vitro.
  • En el cuarto día aprendí que Lost es ficción (aunque mi mente no lo aceptó hasta el día 23).
  • Al séptimo día aprendí a contar.
  • Al sexto día aprendí que el marketing y la publicidad viral no encierran sino más que el alma del colectivo consumidor, mutante y fluctuante como la misma suma de unas inteligencias enfrascadas en el mundano hedonismo y seducidas por un poco de eyecandy superficial.
  • El doceavo día me enteré de que para derrotar a Bush primero habría que destruir sus seis horcruxes.
  • El cuadragésimo segundo día me enseñaron a hacer punchi punchi con la boca y un micrófono, cosa que siempre quise hacer durante las noches solitarias (???????).
  • Al día dieciséis los negritos me enseñaron su secreto para tener los dientes siempre blancos, independientemente de las bajas condiciones sociales y de que no saben ni pronunciar 'dentífrico'.
  • Al segundo día me enseñaron que más vale pájaro en mano que cien volanto (y me costó entender, porque... es obvio que cien valen mucho más que uno! no tiene sentido!... un minuto, creo que al final no lo entendí nada).
  • Al treceavo día aprendí la Seguna Dey de la Termodinámica: "La cantidad de entropía de cualquier sistema aislado termodinámicamente tiende a incrementarse con el tiempo, hasta alcanzar un valor máximo".
  • Al día número quince aprendí a no combinar medias fucsia con camisa celeste. Bah, a no combinad medias fucsia con nada.
  • Al día treinta aprendí a siempre usar preservativo... por el camino difícil.

Luego de un mes más o menos había aprendido casi todo lo que hay que saber en la vida (excepto cómo obtener una afeitada bien al ras, aunque todos sabemos que eso es imposible) y estuve listo para marcharme.
En realidad estaba hinchado las bolas.

Así que cruzamos África, Robin y yo, de nuevo según el absudro criterio de dirigirnos a los lugares con nombres graciosos. Así acabamos en Yemen, que suena a "semen".
Entonces sentimos el impulso de practicar turismo aventura en Irak, porque queríamos ver lo que era una verdadera democracia.

Bordeamos Arabia Saudita con mucho cuidado, porque alguien nos había dicho "guarda que te embocan" y como ni Robin ni yo queriamos ser embocados, evitamos esa tierra donde los hijos de puta caminan sueltos por la calle.

Cruzamos el Golfo Pérsico a nado y pisamos terreno iraquiense. Al principio no lo notamos, pero luego de unos días se hizo obvio que estábamos en Babilonia en el 100 antes de Cristo, sobre todo porque así lo indicaba mi fiel Sony Ericsson W200. Lamentablemente, en el momento en que sacaba mi W200 y lo iluminaba para chequear el mail, dos o tres babilonios se reunieron para observar el extraño artefacto. Yo miré a uno y le dije: "che flaco, no tenés un enchufe para poner a cargar el celular?" y el tipo se escandalizó, gritando cosas en árabe antiguo (incluso creí distinguir un 'abarahá la banana' escondido), y para colmo en ese momento el celular empezó a sonar, y para colmo de colmos sobre un techo apareció el chabón de Assassin's Creed y derribó a uno de los muchos que se habían parado a observar de un flechazo, pero sólo yo parecía verlo, y desapareció antes de que alguien más lo hiciera.

Los guardias que andaban por ahí me rodearon y apresaron en cuanto terminaron de devorar, degustar, digerir y excretar su medialuna con café. Increíble, en 2108 años el servicio de policía no había cambiado ni un pelo de rana calva.
La cuestión es que yo estaba hasta las manos, y lo más pior: Robin se quitó su antifaz, su capa, y huyó, mimetizandose entre una manada de monos que correteaba por ahí.

Bueno, estoy escribiendo desde el baño y según me dicen hay una cola de ocho cuadras y media para usarlo, así que es hora de huír por la ventanita sin tirar de la cadena, por supuesto.

4 comentarios:

Rambo123 dijo...

Es nif

Anónimo dijo...

weifowejfimxqwpoidjweinecwifnwerofjweopfweewmi`fhwenfweoncwe`f

ewasdfascsvazsdfeghfdbas dijo...

WOOOOOOOOGGGGGGKGKGGGGKKGKGKKGKGKG LÇULZ!ª

m. dijo...

si escribo en castellano quedo como una tarada no?
mejor no digo nada
chau